La paradoja de nuestro tiempo es que:
· Tenemos edificios más altos, pero temperamentos
cortos.
· Autopistas más anchas, pero puntos de vista
más estrechos.
· Gastamos más, pero
tenemos menos.
· Compramos más, pero
disfrutamos menos.
· Tenemos casas más grandes, pero familias más pequeñas.
· Más compromisos, pero menos tiempo.
· Tenemos más títulos, pero menos sentido común.
· Más conocimiento, pero menos criterio.
· Más expertos, pero más
problemas.
· Más medicinas y
menos salud.
· Hemos multiplicado nuestras posesiones,
pero hemos reducido nuestros valores.
· Hablamos mucho, amamos poco, odiamos
demasiado. Aprendimos a armar una vida pero
no a vivirla plenamente.
· Hemos llegado a la luna y regresado, pero tenemos problemas a la hora de cruzar la calle y conocer a nuestro vecino...
· Hemos conquistado el espacio exterior, pero no el interior.
· Limpiamos el aire, pero polucionamos nuestras
almas.
· Tenemos mayores ingresos, pero
menos moral.
· Hemos aumentado la cantidad, pero no la
calidad.
· Estos son tiempos de personas más altas, con caracteres más débiles,
con más libertad, pero menos alegría,
con más comida pero menos nutrición.
· Son días en los que llegan dos sueldos a casa pero aumentan los
divorcios.
· Son tiempos de casas más lindas,
pero hogares rotos.
· Un tiempo con
demasiado en la vidriera y poco de puertas adentro.
Y es un tiempo en que la tecnología puede hacerte llegar este mensaje y al mismo tiempo tú puedes decidir marcar la diferencia o apretar eliminar. "No guardes nada para una ocasión especial"
Cada día que vives es una ocasión especial, por eso...
· Lee más y limpia menos.
· Siéntate en la terraza y admira la vista
sin fijarte únicamente en las malas hierbas.
· Pasa más tiempo con tu familia y amigos y menos tiempo trabajando.
· La vida es una sucesión de experiencias
para disfrutar,
no para sobrevivir...
· Usa tus copas de cristal, ponte tu nueva ropa para ir al supermercado.
· No guardes tu mejor perfume para esa fiesta especial, úsalo
cada vez que te den ganas de hacerlo.
· Las frases "algún día", "uno de estos días"...
quítalas de tu vocabulario.
· Si vale la pena hacerlo, oírlo, verlo, quiero poder disfrutarlo
ahora.
Si supiéramos el tiempo de vida que nos queda, seguramente desearíamos estar con nuestros seres queridos, iríamos a comer nuestra comida preferida, visitaríamos los sitios que amamos...
Son pequeñas cosas las que nos harían enojar si supiéramos que nuestras horas están limitadas...
· Enojados porque dejamos de ver a nuestros mejores amigos
· Enojados porque no escribimos aquellas cartas que pensábamos escribir "
uno de estos días".
· Enojados y tristes porque no dijimos a nuestros padres, hermanos, hijos, sobrinos, amigos,
cuánto los queremos.
Por eso... no intentes retardar o detener o guardar nada que agregaría risa y alegría a tu vida, cada día, hora, minuto, semana…